jueves, 27 de noviembre de 2008

El PP muestra su “satisfacción” por que la UE respalde su posición en la reforma de la Política Agrícola Común

•José Ignacio Llorens valora positivamente que el Parlamento Europeo haya reducido la propuesta de la Comisión Europea de incremento de las modulaciones.
•Si hay problemas de producción porque se ha producido una situación de escasez, es absolutamente contradictorio que se sigan recortando las rentas a un sector que está abandonando la actividad.

El portavoz de Agricultura del Grupo Popular, José Ignacio Llorens, aseguró hoy que hay “satisfacción” en el PP porque la posición mantenida por su grupo sobre la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) “ha sido respaldada” en el acuerdo conseguido entre los Veintisiete en Bruselas.

En declaraciones a los medios en el Congreso, Llorens valoró positivamente que el Parlamento Europeo haya rebajado la propuesta de la Comisión Europea de incrementar el 13% las modulaciones (la reducción de las ayudas directas a los agricultores), dejándola en el 10%, aunque precisó que “nos oponemos a cualquier aumento de recorte de las rentas del sector agrario, un sector que en España vive una crisis mucho más grave que otros sectores productivos, y que en Europa tiene una importancia estratégica enorme”.

“Consideramos”, continuó, “que recortar las rentas, que en definitiva supone incentivar el abandono de la producción agraria, es un error que finalmente tendrá que corregirse, porque no es el momento”. “Si hay problemas de producción porque se ha producido una situación de escasez, es absolutamente contradictorio que se sigan recortando las rentas a un sector que está abandonando la actividad”, añadió.

Asimismo, Llorens recordó que fue Mariano Rajoy quien impulsó la creación de una subcomisión en el Congreso para abordar la reforma de la PAC, y que mientras el PP mantuvo en todo momento una posición contraria a la reducción de las ayudas agrarias y así lo hizo notar en el texto alternativo que presentó como voto particular a las conclusiones de la Comisión, el PSOE sí aceptó esa reducción.

martes, 4 de noviembre de 2008

Los recortes sociales de ZP

No habrá recortes sociales”, es más, enfatiza Zapatero, “y este Gobierno es el único que garantiza que no los haya”, que es tanto como decir que cualquier otro gobierno, como lo que quiere en el fondo es perder las elecciones, recortaría las prestaciones sociales. Es el viejo tópico “progresista” de siempre, ¡Cuidado que viene la derecha, y os quitaran las pensiones!, proclamaba Felipe González en el 93, para proseguir su agónico mandato.
Luego en el 96, resultó que el Gobierno del PSOE acabó pidiendo un crédito extraordinario a los bancos para pagar la paga extra de Navidad, porque el paro ya se había situado en el 22%, el déficit en el 7% y los tipos de interés por encima del 15%, y claro como en realidad de donde salían las prestaciones es de los cotizantes de la S.S., es decir de los que trabajan, las cuentas no cuadraban. Pues bien, ZP ya en campaña, a punto de conquistar “La legislatura por el pleno empleo, motivos para creer”, ¿recuerdan?, volvió a las ya proverbiales andanadas electorales de los socialistas. “Si tu no vas, ellos vuelven”. Ellos son los que quitan las pensiones, los antipatriotas que anuncian la crisis. Y el slogan funcionó.
Pocos meses han tenido que pasar, para descubrir lo inocultable. Del crecimiento hemos pasado a la recesión, el superávit se ha evaporado y transformado en déficit, y en un año tenemos 800.000 parados más, esto es 800.000 cotizantes menos, que encima tienen que percibir, con todo el derecho del mundo, las prestaciones al desempleo, que es la partida que más crece en los Presupuestos del Estado, justo un 24%, hasta alcanzar los 20.000 millones de euros, que es prácticamente igual a lo que se destinará a la inversión pública en infraestructuras, que sólo crece el 4,4%.
Sin duda Zapatero contabiliza como un gasto social lo que no es más que una obligación del Estado, que es la de garantizar el derecho al cobro del desempleo al que ha perdido su trabajo, pero los gastos sociales a los que se refería nuestro ínclito Presidente de Gobierno, en realidad experimentan recortes importantes. No hablemos ya de esa famosa Ley de Dependencia que nació sin fondos, a la que podrían acogerse más de 60.000 catalanes y que sin embargo sólo se ha aplicado a 37. Esta misma semana en el Congreso de los Diputados, el Grupo Popular ha presentado una proposición para la mejora de la financiación de la Sanidad, porque es conocida la insuficiencia de recursos de la que dispone la Sanidad Pública.
Pero como no hay dinero para algunas cosas, la propuesta del PP apoyada por CIU, fue derrotada por los votos del PSOE, IU y los muy catalanistas y “sociales” votos del PSC, ERC e IC, en un momento en que se ha recortado en 3.000 millones de euros el anticipo de la deuda en Sanidad que el Estado tiene con las Comunidades Autónomas, y que ZP se había comprometido con los Presidentes Autonómicos a pagar, y cuando la Generalitat plantea precisamente el copago sanitario, porque tiene otras prioridades, como los coches fantásticos, como esos 86 millones de euros para atender a los servicios “diplomáticos” del exterior, dirigidos por la parentela, o el incesante incremento de personal que se lleva una cuarta parte de los gastos de la Generalitat.
O sea que mala señal es que Zapatero prometa que no habrá recortes sociales, porque siempre hace lo contrario de lo que dice. Presumía de talante y diálogo, y nunca ningún gobierno ha hecho tanto la oposición a la Oposición. Pedía transparencia y no vamos ni a saber quiénes son los bancos que se van a llevar la fortuna que les va a regalar el Estado. Aseguraba que había roto, mientras la reanudaba, la negociación con los terroristas, y proclamaba que los españoles nos merecíamos un gobierno que no mintiera y nadie nos ha engañado tanto.
Ya sabemos que cuando cada día hay 2.700 parados más, que es justo al revés de lo que ocurría cuando gobernaba Aznar, porque entonces 2.700 ciudadanos encontraban diariamente empleo, es muy difícil alcanzar los objetivos sociales que promete Zapatero. También sabemos que el “malvado” Bush es el culpable de todo y que no se puede preguntar antipatrióticamente quiénes serán los bancos que se llevarán los 150.000 millones de euros, no contabilizados por cierto en los Presupuestos del Estado, ni a que se van a destinar, pero nos gustaría saber a quien trasladará las culpas Zapatero a partir de hoy, si Obama gana las elecciones.